
El legado centenario de Avon abraza el futuro del servicio al empleado con Zendesk
Avon, un icono mundial que lleva 139 años empoderando a las mujeres, se asoció con Zendesk para modernizar el servicio al empleado sin perder su toque humano. Al agilizar el soporte en 32 mercados, Avon permitió que su equipo de People Services trabajara más rápido y de manera más inteligente y personal. ¿El resultado? Un modelo con la tecnología de Zendesk basado en la empatía y preparado para el futuro, con un 98,4 % de satisfacción de los empleados y tiempos de resolución medios de poco más de 4 horas.

"Zendesk se diseñó para que fuera sencillo de poner en marcha y lo suficientemente flexible como para crecer con nosotros a medida que nuestras necesidades evolucionaran".
Karolina Michalska
Head of Global People Services - Avon
"Zendesk contribuye directamente a nuestro modelo operativo. No solo resolvemos los tickets, sino que damos forma a la experiencia del empleado de una manera que se alinea con la transformación de nuestra área de Personas".
Karolina Michalska
Head of Global People Services - Avon
Fundada en
1886
Oficinas centrales
Londres, Reino Unido
Cliente de Zendesk desde
2019
Equipo de People Services
34 especialistas
98,4 %
tasa de satisfacción del empleado
4,3 horas
tiempo medio de resolución
aprox. 5000
empleados respaldados
32
mercados respaldados
139 años de impacto y de propósito, creada para las personas
Avon lleva inspirando confianza y ofreciendo oportunidades desde 1886, mucho antes de que tener un propósito se convirtiera en una expresión de moda. Su estrategia pionera de venta directa ha permitido la creación de un movimiento que lucha por brindarles una oportunidad de independencia económica a las mujeres y corresponder a través de poderosas causas, desde la concienciación sobre el cáncer de mama hasta acabar con la violencia de género. "A lo largo de estos 139 años, no hemos dejado de avanzar con propósito", asegura Karolina Michalska, Head of Global People Services en Avon. "Esa es una de las cosas que tiene Avon realmente de especial".
Hoy, Avon sigue actuando en base a su propósito, a la vez amplía su huella digital y su actividad en el comercio minorista para convertirse en una marca de belleza con una verdadera presencia omnicanal. Su cartera global abarca productos para el cuidado de la piel, cosmética, fragancias, cuidado personal y bienestar, y acerca sus productos a millones de consumidores en más de 100 países.
Dentro de la organización, ese mismo impulso para la transformación está remodelando la forma en que Avon se preocupa por sus 5000 empleados. Un equipo de People Services compuesto por 34 especialistas proporciona asistencia en 32 mercados y 5 idiomas, y gestiona momentos clave a lo largo del recorrido del empleado. Desde su incorporación hasta la preparación de nóminas y beneficios, este equipo ofrece un servicio eficiente y muy humano.
Y ese toque humano no es una ventaja: está integrado en el diseño. En Avon, el servicio a los empleados está destinado a sentirse personal, sin importar la ubicación, el idioma o la complejidad. "Nuestra prioridad es proporcionar una experiencia fluida a la vez que mantenemos las relaciones", dice Michalska. “Ese enfoque personal, centrado en las personas, es fundamental para quiénes somos”.
La entrega de ese tipo de experiencia requiere más que procesos globales: requiere empatía, matices e intención. El equipo de People Services de Avon se amplía de forma cuidadosa, se adapta a las necesidades locales y tiene muy en cuenta aquello que más valoran los empleados. "Queremos escalar, pero queremos hacerlo de forma inteligente", explica Michalska. "No imponiendo soluciones globales a los equipos locales, sino haciendo que funcione para cada uno de ellos, estén donde estén".

Un análisis del pasado para avanzar hacia el futuro
La transformación del servicio a los empleados en una compañía tal como se estableció cuando Avon aportó su parte de complejidades. Años de crecimiento en diferentes geografías habían dejado un mosaico de herramientas, prácticas y expectativas. "Podemos imaginarnos cuál era la situación", dice Michalska. “Numerosos sistemas, plataformas, soluciones, o incluso una falta total de ellos”.
No obstante, el desafío fue más allá del simplemente tecnológico. Transformar los hábitos culturales y conductuales, asentados a lo largo de las décadas, suponía un gran reto. "La plantilla estaba acostumbrada a hacer las cosas de cierta manera: llamar por teléfono, ir a preguntarle a un compañero o tirar de contactos", explica Michalska. Pasar a un modelo de soporte digital significaba cambiar no solo los procesos y la tecnología, sino también las mentalidades.
El equipo también se enfrentó a procesos incoherentes en todas las regiones, muchos de ellos demasiado complejos u obsoletos. Sin un enfoque unificado, mantener la calidad y la eficiencia del servicio era una tarea cada vez más difícil. "La manera compleja de hacer las cosas en el pasado, y en algunos casos en el presente, generó ineficiencias reales", dice Michalska.
Era necesario encontrar una coherencia global que dejara espacio a la flexibilidad local. Avon necesitaba una solución que pudiera ampliarse de manera inteligente y sin forzar la implementación de un modelo único. "No queríamos tan solo introducir procesos globales en los mercados", señala Michalska. "Teníamos que comprender qué se recibiría bien y qué se podría interponer en el camino".
Para Avon, el desafío no se encontraba únicamente en la modernización, sino en evolucionar conscientemente sin poner en riesgo el cuidado, la confianza y la autenticidad que venían definiendo la marca desde hacía más de un siglo.

El impulso de servicio al empleado con Zendesk
Avon, una empresa con décadas de legado y valores profundamente arraigados, sabía que la transformación no podía llegar a costa de la conexión. El cambio debía ser meditado, adaptable y estar alineado con la forma real de trabajar de la plantilla. Zendesk ofreció exactamente eso: una plataforma creada para crecer teniendo en cuenta las necesidades de Avon, no dictándolas. "Fue diseñado para ser fácil de poner en marcha", analiza Michalska, "y lo suficientemente flexible como para crecer con nosotros a medida que nuestras necesidades evolucionaran".
Zendesk Support aportó estructura a lo que antes había sido un panorama de servicios internos fragmentado. En lugar de correos sueltos y formas de trabajar informales, Avon ahora dispone de un sistema centralizado que permite hacer el seguimiento de cada solicitud y que está visible independientemente de la región.
Los empleados están conectados con el equipo de People Services por correo electrónico, el Web Widget de Zendesk o un complemento de Outlook, y toda la información aparece con una vista unificada en el espacio de trabajo de agente de Zendesk. Entre bastidores, los especialistas utilizan disparadores, automatizaciones, macros y conversaciones secundarias para gestionar el volumen, coordinarse con los proveedores y que todo funcione sin problemas.
El equipo también aprovecha las herramientas de informes y analíticas de Zendesk para anticiparse a las necesidades. La información en tiempo real sobre las tendencias de los tickets, los tiempos de resolución y la distribución de la carga de trabajo les ayuda a ajustar continuamente el rendimiento. "Utilizamos los informes para medir dónde nos encontramos, mantener conversaciones relevantes con las partes interesadas y mejorar a partir de ahí", comenta Michalska.
A medida que la plataforma fue adoptándose, su papel se iba haciendo más importante. Avon implementó un Centro de ayuda de la marca para empleados, que les daba acceso a respuestas las 24 horas del día, los 7 días de la semana, mientras que las encuestas de satisfacción aportaban comentarios constantes que permitían al equipo corregir el curso, mejorar los procesos y conocer la opinión de los empleados. "Subestimamos la magia de la comunicación y el feedback de los empleados. Simplificar las cosas, descartar lo que no sea útil y dejar de hacer lo que no le sirva al personal. Es ahí donde empieza la eficiencia real", concluye Michalska.

Rendimiento que genera confianza
Lo que comenzó como una implementación de soporte pronto evolucionó hasta convertirse en el eje central del modelo global de People Services de Avon, un modelo con tecnología de Zendesk y basado en la empatía, la adaptabilidad y el impacto a largo plazo.
Desde la implementación de Zendesk, Avon ha alcanzado unos niveles de rapidez, satisfacción y calidad del servicio sin precedentes. Ahora, el equipo mantiene una tasa de satisfacción de los empleados excepcional del 98,4 %, a pesar de estar experimentando un cambio organizativo a gran escala. "Todavía estamos pasando por una importante transformación y, sin embargo, nuestra plantilla está contenta con la forma en que la atendemos", dice Michalska. "Esto demuestra que estamos cumpliendo nuestra promesa".
Este cambio ha llevado directamente a un mayor rendimiento. La mayoría de las consultas, Avon las resuelve ahora en poco más de 4 horas de media. Esto supera con creces las expectativas para una prestación recién centralizada. "Nuestro temor era que, al cambiar las prácticas asentadas, el personal no sacara el trabajo adelante", reflexiona Michalska. "Pero ese temor ha quedado atrás. La realidad es que estamos ofreciendo calidad y rapidez del servicio".
Zendesk también se ha convertido en una herramienta de confianza. Una encuesta de satisfacción totalmente integrada en el flujo de trabajo permite al equipo no solo recopilar el feedback, sino también actuar en consecuencia. "Ahora lo tenemos todo a punto", dice Michalska. "Nos permite reaccionar ante situaciones negativas en el momento y analizar qué salió mal". Cada dato se convierte en una oportunidad para mejorar, no solo los procesos, sino también las relaciones.
Aún más significativo es cómo Zendesk apoya la estrategia de recursos humanos global de Avon. "Zendesk contribuye directamente a nuestro modelo operativo", explica Michalska. "No solo resolvemos los tickets, sino que damos forma a la experiencia del empleado de una manera que se alinea con la transformación de nuestra área de Personas".
Lo que Avon ha construido es más que una herramienta de soporte eficiente: es la base para generar una mayor confianza. Es un sistema en el que los empleados confían; un modelo en el que el equipo cree; y una plataforma que ayuda a Avon a escalar su propósito, sin perder nunca de vista a su gente.

Visión de futuro con Zendesk
Avon está construyendo una base sólida para desarrollar aún más su modelo de servicio al empleado en el futuro. Todavía quedan capacidades por centralizar, como la adquisición y el desarrollo del talento, pero el objetivo es ofrecer un verdadero soporte a los empleados unificado en un solo lugar donde puedan acceder a todo lo que necesitan. "Cuando empezamos este viaje, nuestra promesa era ofrecer una experiencia perfecta", dice Michalska. "Aún no lo hemos logrado del todo, pero cada día avanzamos hacia nuestro objetivo final".
La IA se divisa en el horizonte. Aunque inicialmente Avon adoptó un enfoque cauteloso, ahora el equipo está listo para explorar las prestaciones con tecnología de IA dentro de Zendesk, como la asistencia a agentes y el enrutamiento inteligente. "Hay mucho por explorar", comparte Michalska. "En particular, nos interesa cómo la IA asume las tareas repetitivas y nos permite liberar tiempo para otras tareas más significativas".
De la misma forma que la experiencia del cliente de Avon se ha vuelto omnicanal, también lo harán sus servicios internos. El equipo está planeando introducir nuevos canales de comunicación, como la integración de Microsoft Teams, para reunirse con los empleados donde están y poder mantener la misma consistencia, visibilidad y cuidado de siempre.
Para Michalska, el ingrediente clave no ha cambiado: "Se trata de escuchar, probar y simplificar, y de ir paso a paso", asegura. "No necesitamos que sea todo perfecto desde el primer día; tan solo debemos seguir aprendiendo y avanzando".
Zendesk sigue siendo un socio clave en este viaje. Con una plataforma lo suficientemente flexible como para escalar y lo suficientemente humana como para apoyar la cultura única de Avon, su asociación con Zendesk le ayuda a dar vida a su estrategia de Personas, una interacción tras otra.
